CienciaCoLab – Edición 2025

Te damos la bienvenida a este espacio dedicado a las lideresas y líderes comunitarios del segundo cohorte de CienciaCoLab. Son personas comprometidas con el bienestar colectivo, que desde sus barrios, pueblos y proyectos, impulsan soluciones sostenibles ancladas en la ciencia, la educación y la justicia social. Aquí compartimos sus historias y propuestas porque creemos que el conocimiento, cuando nace desde la comunidad, tiene el poder de transformar realidades.

Conoce a quienes transforman nuestras comunidades

Iván Báez Santos, de 56 años y residente de San Germán, lidera la comunidad de Caín Bajo desde hace más de una década y es actualmente el presidente y fundador de la Asociación de Residentes de dicha comunidad. Esta comunidad, empobrecida y envejecida, además de su indefensión aprendida y la dependencia a que el estado o líderes realicen las cosas, enfrenta retos como la falta de pavimentación, acceso deficiente a agua y luz, entre otros. Iván, ha impulsado iniciativas como el programa de tutorías “Pa’l Barrio”, el “Campamento Eduvertido” y festivales culturales, combinando voluntariado y alianzas académicas. Su idea de proyecto en CienciaCoLab busca fortalecer estas actividades y fomentar liderazgo juvenil mediante la Terapia Comunitaria Integrativa, apostando por la ciencia social como herramienta para observar, analizar y transformar la comunidad desde sus propias necesidades.

Ruth Pagán Bayona, de 49 años y residente de Ponce, ha servido por más de 12 años a la comunidad de Cantera, una zona marcada por la pobreza, el abandono de viviendas y el envejecimiento poblacional. A través de su organización de fé, ha promovido talleres de prevención de desastres, donaciones, actividades familiares y distribución de artículos básicos. Ruth considera que la educación científica son urgentes en su comunidad y propone, como parte de CienciaCoLab, establecer un huerto comunitario autosustentable que utilice sistemas de reciclaje de agua y sirva como espacio terapéutico para adultos mayores. Este proyecto busca reducir el estrés, promover la autosuficiencia alimentaria y revitalizar la participación social mediante la ciencia aplicada.

Lesbia Luna Reyes, de 55 años y residente de Salinas, ha trabajado como servidora pública en el Departamento de la Familia, atendiendo comunidades marcadas por la pobreza extrema, la violencia doméstica, y la escasez de servicios básicos. Su liderazgo ha estado enfocado en organizar ferias de salud, repartir alimentos y ofrecer talleres preventivos, con un enfoque en la niñez, los adultos mayores y las personas con discapacidad. Lesbia desea utilizar su participación en CienciaCoLab para diseñar un programa que integre ciencia, la alimentación y la salud mental con el objetivo de fomentar la salud física, emocional y social de los adultos mayores, abordando temas como la nutrición, la salud mental y el ejercicio físico desde una perspectiva científica con un huerto comunitario.

John Paul López Villegas, de 29 años y natural de San Juan, se ha dedicado más de 10 años al servicio comunitario en la Península de Cantera. Desde su niñez ha liderado múltiples proyectos sociales y ambientales en respuesta a la pobreza, el desempleo, el deterioro de infraestructura y los efectos de desastres naturales. Este ha promovido la justicia social, la ayuda a envejecientes, la entrega de suministros y el desarrollo juvenil. Su propuesta en CienciaCoLab se centra en un proyecto intergeneracional que una a jóvenes y adultos a través de la ciencia y la tecnología para crear soluciones sostenibles como huertos urbanos, talleres educativos y campañas ambientales. John Paul defiende la ciencia como una herramienta de transformación comunitaria, empoderamiento ciudadano y sostenibilidad.

Sulanet Soto, de 42 años y residente de San Juan, lidera un grupo de familias homeschoolers desde hace dos años en la Finca NOA, en Toa Baja. Su comunidad está compuesta por familias de toda la isla que han optado por un modelo educativo alternativo y colaborativo centrado en la agroecología. A través del grupo Guali Conuco, Sulanet ha creado un huerto comunitario donde niños y adultos aprenden sobre agricultura orgánica y sustentabilidad. Reconocida por el municipio y la Cámara de Representantes, Sulanet propone en CienciaCoLab expandir estos espacios a otras regiones de la isla, transformando terrenos en desuso en centros de educación agrícola y científica. Su proyecto busca fomentar el aprendizaje experimental, la seguridad alimentaria y el empoderamiento colectivo a través del conocimiento científico y ecológico.